
El universo se está expandiendo, y esa expansión estira la luz que viaja a través del espacio en un fenómeno conocido como desplazamiento al rojo cosmológico. Cuanto mayor sea el desplazamiento al rojo, mayor es la distancia que ha recorrido la luz. Como resultado, se necesitan telescopios con detectores infrarrojos para ver la luz de las primeras galaxias más distantes.
credits
Ilustración
Nasa, ESA, Leah Hustak (STSCi)